viernes, 28 de junio de 2013

Sentipensamientos sobre el juego, el arte y nosotrxs


Vean unx niñx jugando, y verán un artista... Cuando somos pequeños tenemos la capacidad natural de jugar y crear... En ese mundo todo es posible y podemos ser todo lo que soñamos... ¿Queremos una nave espacial, una caverna, una playa, un hospital? ¿Queremos una capa para volar, una micrófono, una máquina del tiempo, herramientas para hacer un puente...? Vamos aprendiendo que lo que no se tiene, se puede inventar; lo que todavía no se es y el lugar que todavía no existe, también puede crearse. Dibujamos, creamos personajes, cantamos, movemos nuestro cuerpo para danzar sin pautas, para correr, para saltar, tocar instrumentos, ¡y sentimos que lo hacemos bien! Claro está que esto acontece si el ambiente en el que crecemos acompaña de algún modo este desarrollo. Vamos aprendiendo a ser, a habitarnos, habitar el mundo explorando, experimentando posibilidades a través del juego, que es el mismo espacio del arte, tanto en la infancia como en la adultez.
¡Qué aprendizaje! Es el aprendizaje de la capacidad de transformación y construcción de nosotrxs mismxs, de modo auténtico. Transformación de nuestra situación actual, de nuestros deseos, del mismo mundo exterior que nos rodea: aprendemos que todo puede recrearse desde nuestra imaginación, nuestro cuerpo y desde el trabajo colectivo.
Este saber tan preciado, es el que a veces se va diluyendo en distintas instancias de la vida y por factores sociales, familiares, materiales y educativos... Aparece la vergüenza, el perfeccionismo, la exigencia interior y exterior, los deberes por encima del desarrollo...
Ver nota completa en

https://www.facebook.com/notes/laura-gallo-tierracantando/sentipensamientos-sobre-el-juego-el-arte-y-nosotrxs/10200240110420120


Laura Gallo

No hay comentarios:

Publicar un comentario